La cosa es que “Coki olió sangre” y tuvo que apretar el acelerador para tratar de ubicar a algunos integrantes del bloque Justicialista de la Legislatura, que no veían con malos ojos acompañar el nuevo pedido de endeudamiento del Ejecutivo, lo que provocó un comunicado del Partido, rubricado por Capitanich y el secretario general Raúl Germán Bittel, que generó un rechazo público, apuntando contra algo que se leyó como “extorsivo”.

“Instamos a los diputados de nuestro bloque y a los afiliados a nuestro Partido Justicialista, a acatar estrictamente la consigna de rechazar este proyecto de endeudamiento, conforme a las prescripciones del artículo 29 de la Constitución Nacional y los artículos 5 y concomitantes de la Constitución Provincial. El incumplimiento de esta consigna implicará la aplicación de las sanciones establecidas en la carta orgánica y el tribunal de disciplina partidaria”, cerró el escrito.

Sin decirlo, el comunicado alertó a los diputados del Frente Chaqueño de ser pasibles de expulsión en caso de acompañar los proyectos del oficialismo. Con las cosas así, y al momento de la sesión, los legisladores protagonizaron un acalorado debate, que duró más de cinco horas. Algo que se “adelantó” en la discusión, ya que restaban puntos por tratarse, pero el legislador Iván Gyoker hizo una moción, desatando las diferentes posturas sobre el tema, lo que originó el debate y la posterior retirada de justicialistas del recinto, para dejar sin quorum la sesión.

Obviamente, sobre las bancas se afirmó que en caso de aprobarse el préstamo, los fondos recién estarían disponibles en junio del próximo año, cuando la temporada de cortes por el verano ya habría pasado. “Es una mentira, porque para mí, mandan una ley para que no se apruebe”, sentenció Santiago Pérez Pons, sugiriendo que el proyecto estaba mal planteado desde el inicio.

Tras esta situación, y con temas fundamentales por definir, el Parlamento volverá a sesionar el lunes 9 de septiembre, una reprogramación que se trató y aprobó ni bien comenzó la última sesión, ya que los legisladores deben viajar a Misiones para sesionar en el Parlamento del Norte Grande el miércoles 11.

Pero la cosa no quedó ahí, desde el oficialismo recogieron rápidamente el guante para responder “la actitud autoritaria” del ex mandatario Capitanich y le recordaron muchas de las definiciones logradas en su gestión bajo el acompañamiento de la bancada opositora, esperando un gesto de madurez política recíproca en este contexto, algo que parece que está lejos de acontecer…